martes, 19 de septiembre de 2006

El Aceite de Almendras

(Aceite de Almendras | Prunus amygdalus dulcis)

El almendro (Prunas amygdalus dulcis) tiene su origen en las regiones montañosas de Asia central (Persia, Mesopotamia), donde es cultivado desde épocas remotas (5000 a 4000 a.C.), y a través de rutas comerciales, por todas las civilizaciones primitivas. En España probablemente fue introducido por los fenicios, donde en la actualidad se produce alrededor de 250.000 Tm tras el principal productor que son los EUA (380.000 Tm.)

El almendro es un árbol caducifolio de la familia de las rosáceas. Puede alcanzar de 3 a 5 m de altura. De tallo liso, verde y a veces amarillo cuando es joven, pasa a ser agrietado, escamoso, cremoso y grisáceo cuando es adulto. Sus hojas son simples, lanceoladas, largas, estrechas y puntiagudas, de 7.5 a 12.5 cm de longitud y color verde intenso, con bordes dentados o festoneados. La flor solitaria o en grupos de 2 o 4, es pentámera con cinco sépalos, cinco pétalos con colores variables entre blanco y rosado dependiendo de las especies de unos 3 a 5 cm de diámetro.

El fruto es la almendra de unos 3 a 6cm de longitud. La etimología del nombre castellano hoy usual pasa por una arabización de mandorla y ésta de la palabra latina amyndäla que por su parte es una variación de amygdäla. El aceite de este fruto es utilizado como emoliente y la esencia de almendras amargas en perfumería, por su aroma. El almendruco es el fruto tierno e inmaduro. Otra aplicación del aceite de almendras es su uso en el mantenimiento de instrumentos musicales como la dulzaina.
Es un frutal de zonas cálidas y tolera poco el frío. La mayoría de los almendros se cultivan en secano, sobre suelos sueltos y arenosos. La semilla posee dos tegumentos envolventes, la testa y el tegmen. La gran mayoría de las variedades cultivadas hoy en día son autofértiles, el polen de una variedad puede polinizarse a sí misma. Por ello ya no se hace necesaria la presencia de dos variedades distintas en las explotaciones.



Composición:
El aceite de almendras es rico en ácidos grasos como el oleico (monoinsaturado) y el linoleico (poliinsaturado, omega-6). El ácido linoleico previene la pérdida de agua transepidérmica a nivel cutáneo, es altamente hidratante y emoliente para el cuidado de la piel. También actúa estabilizando la membrana celular de la epidermis y tiene un efecto antiinflamatorio. También contiene Vitamina E que aporta propiedades antioxidantes y protege las estructuras vitales de las células neutralizando los “radicales libres” que son moléculas inestables producidas debido a distintos factores comoo la contaminación ambiental, la radiación,... Muchos estudios demuestran que la vitamina E ayuda a reducir los efectos de la psoriasis y el eritema y por consiguiente puede favorecer la prevención del riesgo de padecer cáncer. También favorece la reducción de las cicatrices de heridas y mejora la apariencia de las estrías.

Las almendras crudas también son fuente de Vitamina B1 (tiamina) necesaria para el metabolismo de los carbohidratos, Vitamina B2 (riboflavina) importante para la respiración celular en los tejidos y por tanto para la salud de la piel además de contener proteínas, magnesio, Vitamina E (alfa-tocoferol) y zinc, necesarios para prevenir desórdenes cutáneos.

Propiedades:
El aceite de almendras es un nutriente utilizado dessde la antigüedad para belleza de la piel y en el tratamiento de heridas y lesiones. Puede utilizarse para tratar las manchas cutáneas y para nutrir e hidratar la piel seca. Sus propiedades emolientes favorecen el equilibrio hídrico a nivel cutáneo y previenen la pérdida de agua transepidérmica. Además el aceite de almendras se considera un extraordinario aliado para la limpieza de la piel.

Puede utilizarse en todo tipo de pieles pero es especialmente indicado en caso de pieles secas o irritadas. Es muy útil para reducir los picores o la inflamación cutánea y ayuda a proteger la superficie de la piel, suavizándola y aportándole una apariencia joven y sana.

Debido a su composición aporta elasticidad y suavidad a la piel y suele aplicarse durante el embarazo para prevenir la pérdida de firmeza de la piel y también la aparición de las estrías en el abdomen, busto y caderas.

Aplicado en forma de masaje permite tratar dolores musculares y lesiones de forma eficaz. El aceite de almendras es una base de masaje excelente dado que su penetración no es excesivamente rápida. Su combinación con aceites esenciales nos abre las puertas al fabuloso mundo de la aromaterapia y aromacosmética...

Resultados Cosméticos:
Las fantásticas propiedades del aceite de almendras ocmo hidratante, nutritivo y regenerador hacen que sea el perfecto aliado en cosmética de tratamiento tanto facial como corporal. Su acción previene y combate el envejecimiento prematuro, las cicatrices, la sequedad cutánea, las estrías, arrugas...

• Emoliente y acondicionador: ayuda a relajar y evitar la inflamación de los tejidos debida al estrés, factores ambientales,...
• Regenerador: estimula de forma naturalla producción de colágeno y elastina, las proteínas de la dermis responsables de la elasticidad y firmeza de la piel. Su alto contenido en Vitaminas A y E lo hace un excelente activo para el cuidado de la piel.
• Hidratante: posee la capacidad de reestablecer el equilibrio natural de los niveles hídricos cutáneos.
• Limpiador: ideal para formular lociones limpiadoras y para remover los restos del maquillaje.
• Fortalecedor: su perfil de actividad permite fortalecer también el cabello seco o débil y su uso regular previene las escamas del cuero cabelludo.

Marta Estebanell Pineda
Lda. en Química y en C. T. Alimentación
Responsable Técnico, Alquimia

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